Hoy, en Barcelona, y otras ciudades de España, hay personas encarceladas en un CIE; encerradas gracias a leyes y cuerpos policiales racistas y clasistas que les intimidan, provocan y maltratan por no tener voz, por no tener derecho a circular y vivir dignamente, POR SER INMIGRANTES o hijos de inmigrantes. Los 68 presos en huelga de hambre en el CIE de Zona Franca piden que se les devuelva su libertad y su dignidad, igual que los compañeros del CIE de Aluche hacían la semana pasada…